En relación a su ciclo reproductivo se estima que una vez formada la pareja permanece junta toda la vida
aunque sí existen separaciones. Crían una sola vez al año; cada pareja anida
solitaria, defendiendo un territorio de uno a dos kilómetros cuadrados. Lo mismo
anidan en praderas áridas, zonas pantanosas o bosques, pero siempre el nido en
el suelo.
Los dos padres construyen el nido. Como material usan ramas y hierbas, algunas
veces llegando a lograr una plataforma o acumulación de estos materiales de
buen tamaño. Es posible que también le agreguen musgo. La nidada usual consiste
de dos huevos. Estos son incubados por ambos padres de 28 a 32 días.
Los pichones pueden andar a las pocas horas de nacidos. Usualmente efectúan el
primer vuelo a los dos meses. Llegan a vivir pasado los 25 años, siendo adultos
a los cuatro.
El macho y la hembra son de apariencias similares. El tamaño varía de acuerdo a
la subespecie, logrando una longitud entre 1.0 a 1.2 metros, con un peso de 3.3
a 4.8 kg. Las alas tienen una envergadura aproximada de 1.9 metros.
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